La mente no distingue lo que es real de lo que es imaginario, por lo que si imaginas una situación estresante tu cuerpo genera cortisol, adrenalina y noradrenalina, de la misma manera que si fuese real.

Además el 90% de las cosas que pensamos e imaginamos nunca suceden.

Estar expuesto de manera continua al estrés puede tener impacto en nuestra salud tanto a nivel emocional como físico y puede causar:

  • ansiedad
  • Depresión
  • Problemas digestivos
  • Dolores de cabeza
  • Problemas de sueño
  • Deterioro de la memoria y la concentración

La buena noticia es que podemos entrenarnos para poner el foco en lo positivo, aprender a gestionar las emociones y disminuir el estrés.

A través de mindfulness aprenderás técnicas de respiración, a estar presente, en el aquí y el ahora, a sentir gratitud, aceptación.

Otras opciones que te pueden ayudar:

  • comer saludablemente
  • Hacer deporte
  • Fomentar la vida social
  • Potenciar tu sentido del humor
  • Tomarte tiempo para ti
  • Estar en contacto con la naturaleza …

¿Qué hacéis vosotr@s para que no se dispare el cortisol?